Artículo publicado por Julen Guerrero en el diario El Correo el 01/09/2017
Esta media noche se cierra el mercado de fichajes en España. Sin entrar en la definición que se le da a la ventana de verano para incorporar jugadores, su nombre es ya de por si muy significativo y nos deja entrever lo que sucede.
Hay quien espera a los 'fichajes rebajas' de última hora y no duda en aguantar hasta el último día para que el jugador apriete a su club de origen y salga más barato, pero la entidad de origen piensa al revés y no cede para que el equipo de destino ponga más dinero...Lo dicho, es un mercado donde parece que predomina el regateo y no me refiero al que se hace durante el partido, sino al que se hace en los despachos.
En fin, que no te das cuenta y estás ya en la jornada tres de Liga, los equipos todavía no están cerrados y unos entrenadores se encuentran con que les han quitado jugadores y todo lo que han preparado durante dos meses de pretemporada no les vale y tienen que empezar de cero. Y otros se ven con futbolistas nuevos, y también tienen que empezar de cero porque hay que acoplar a los recién llegados con el resto de jugadores.
¿Qué sentido tiene estar preparando una plantilla, un equipo y que con dos jornadas de Liga ya disputadas te quiten uno, dos o tres jugadores? Porque está claro que aquí, nuevamente, los más perjudicados son los equipos medianos y pequeños, de los que normalmente los poderosos se aprovechan haciendo a última hora los deberes que debían de haber realizado antes, y se llevan algún jugador que casi siempre suele ser pieza clave en su equipo de origen. Si no, qué sentido tendria ficharlo.
Al final, si como ya es norma, las principales ligas inician sus campeonatos a principios de agosto, nos encontraremos con plantillas y equipos cada vez más impersonales en los que no sabes donde juega cada jugador, por que le puedes ver en el campeonato de Liga hasta con tres equipos diferentes dentro de la misma temporada y lo que es más sorprendente, en tu propio campo.
Algunas ligas como la inglesa, que lo aplicará la próxima temporada, cerrará el mercado justo antes de comenzar la competición, y otras, como la alemana e italiana, es posible que también den ese mismo paso. Son muchas las voces de entrenadores con peso que lo reclaman.
Una consideración al tema. Directores técnicos y agentes son los grandes beneficiados de un sistema que pide a gritos un cambio y no solo por la enorme inflación que sufre el mercado, sino porque solo ellos sacan partido a esta situación.
Finalmente, anotar que el Athletic, con una política de fútbol de cantera, puede ser uno de los grandes perjudicados por este sistema de mercado, más si cuando sale a fichar lo hace en lo que parece inferioridad de condiciones, ya que se aprovechan de que no tiene mucho dónde elegir, y no digamos si le quitasen un jugador a última hora...
Para que este mercado deje de ser lo que está siendo, ya que solo falta que a los futbolistas les suban a un escenario y se haga una vergonzosa subasta pública, ¿no seria más lógico que el cierre del mercado sea el 15 de agosto?