Fuente: cadenaser.com
Los amores a un equipo de fútbol muchas veces van más allá de lo racional y la vida y llegan hasta lo divino. Es común encontrar personas que desean ser enterradas con un símbolo del equipo de toda su vida para 'descansar en paz' con los colores del club que animó durante toda su vida.
Cada vez son más los clubes que te permiten depositar las cenizas de tu ser querido en espacio habilitados cerca de los estadios donde cada fin de semana esa persona iba a sufrir y disfrutar con un partido de fútbol.
Ahora bien, el caso que nos ha contado Ángel Guerra, trabajador de las obras del nuevo San Mamés supera todo lo explicado anteriormente. Ángel fue testigo de como un compañero de obra colocó las cenizas de su suegro entre lo que posteriormente sería el césped del estadio donde cada domingo juega el Athletic Club.