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lunes, 16 de septiembre de 2013

La joya de la corona

Artículo publicado por P. Ruiz en el diario Deia el 16/09/2013

San Mamés abre hoy sus puertas 27 meses y medio después de la colocación de la primera piedra


El estreno de los socios. El pasado viernes los rojiblancos se ejercitaron por segunda vez en el nuevo campo, ya ante la presencia de más de 10.000 socios del Athletic, que lo conocieron 'in situ' en lo que se entendió como una prueba de fuego. (Oskar Martínez, Zigor Alkorta y Pablo Viñas)

El esfuerzo ha merecido la pena". La expresión emana desde San Mames Barria, la sociedad propietaria del nuevo campo. Hoy llega el día D. 27 meses y medio después de que arrancaran las obras. Un tiempo de récord. Aunque los plazos definitivos se evaluarán una vez que el complejo esté construido al cien por cien. Habrá que esperar a inicios de 2015. Hoy es noche de gala. "Se habían generado en algunos foros ciertas dudas sobre si se llegaba a tiempo", recalcan los dueños del campo -Athletic, Diputación Foral de Bizkaia, Gobierno vasco, BBK y Ayuntamiento de Bilbao-, que han invertido, hasta la fecha, 141 millones de euros de los 200 totales que se prevén en el plan financiero.

Quedan los retoques de última hora, frenéticos hasta minutos antes de que arranque el Athletic-Celta, el partido que pasará a la historia como el primero que se disputa en la nueva joya de la corona para la familia rojiblanca. Todo comenzó hace seis años y medio, el 23 de marzo de 2007, cuando la Asamblea Extraordinaria de Socios Compromisarios, el órgano soberano del club, dio el visto bueno. Por entonces, Ana Urquijo, presidenta durante una temporada, tuvo el honor de ejercer de cabeza visible del proyecto, que pasó seguidamente a manos de la Junta Directiva presidida por Fernando García Macua y rematado por la actual presidencia de Josu Urrutia, que cortará la virtual cita que oficializa la apertura de San Mamés, el heredero de la vieja Catedral, con un siglo de servicio como legado.

Algunos sectores tildaban el campo como una obra faraónica, por aquello del alto coste que suponía en tiempos de crisis. Las instituciones, motores del proyecto, rebatieron semejantes argumentos. El minucioso informe económico elaborado al respecto ofreció datos rotundos: "Por cada euro de inversión pública en la construcción (aproximadamente 100 millones de euros) se estima un retorno en términos de recaudación tributaria de 0,9 euros, derivado del impacto económico generado por la actividad". Es decir, el esfuerzo inversor no cae en saco roto. Además, el estudio estima que la actividad económica anual incremental generada por la explotación de nuevo campo respecto al viejo se eleva a 14 millones de euros con un impacto total de 46 millones por temporada, así como una recaudación tributaria de seis millones por ejercicio.

Son las cifras redondas. Unos números que serán más fiables cuando el cálculo se aplique con el campo totalmente construido. Será, entonces, cuando se busquen otros caminos más allá de los domésticos (Liga BBVA y Copa). Esta misma semana se podría oficializar la candidatura de Bilbao como una de las posibles sedes de la Eurocopa 2020, que se celebrará en 13 Estados, y a medio plazo se pujará por acoger una final continental. Es el aval que aporta ser un campo Cinco Estrellas UEFA. El informe económico recoge un impacto directo de 14 millones de euros -58 millones si se habla de ingresos indirectos- en caso de albergar una final, mientras que ese mismo impacto directo se iría hasta los 68 millones si San Mamés fuera sede de grupo de una Eurocopa o de un Mundial.

REAJUSTES

El proyecto del campo se presentó en sociedad el 19 de octubre de 2009. Fue un acto con glamour. José Luis Bilbao, diputado general de Bizkaia, dejó un definición que simboliza la grandeza de San Mamés: "Es la nueva joya de la corona de Bilbao, de Bizkaia ...y de Euskadi". Enfatizó la última parte. Pasados cuatro años de aquel bautizo institucional, el proyecto, diseñado por el arquitecto César Azcárate, ha sufrido algunos reajustes. El aforo se queda en poco más de 53.300 espectadores, se han levantado tres graderíos, se ha instalado una cubierta que ha tomado la referencia del techo del Allianz Arena de Múnich, se ha modificado la idea original del exterior, con unas lamas especiales, el césped procede de Extremadura, el coste final de la construcción ha sufrido un recorte del 25% respecto a las primeras estimaciones, que rondaban los 240 millones de euros...

Esta noche a San Mamés le toca pasar la primera prueba del algodón. A los socios propietarios -Gobierno vasco y Ayuntamiento de Bilbao fueron los últimos es sumarse a un sociedad creada en su origen por Athletic, Diputación Foral de Bizkaia y BBK- les sacude ese cosquilleo que se genera en las horas previas a un acontecimiento de cariz histórico. Una noche que se ha hecho esperar desde que se colocara la primera piedra, el 26 de mayo de 2010. Esta noche las primeras casi 36.000 gargantas -el provisional aforo solo permite la entrada a los socios- encarnarán la magia del San Mamés de toda la vida. Por delante quedará otro año y medio de obras para que el nuevo campo emerja con el cien por cien construido. Es la joya de la corona.