(Fuente: www.laverdad.es publicado por María Zárate el 30/03/12)
Un italiano, seguidor del Athletic desde los 18 años, pidió matrimonio a su novia Valeria con una pancarta gigante en las gradas de San Mamés el pasado domingo
Hemos visto demasiadas veces cómo las canchas de baloncesto de Estados Unidos servían de escenario para románticas y arriesgadas pedidas de mano. Una veces con desenlace feliz y otras con calabazas para el osado novio. Parece que en España no hay tantos valientes que se atrevan a declarar su amor delante de miles de personas, y menos en un campo de fútbol. Pero Alberto Pagno, como buen hincha del Athletic, no se acobarda ante nada ni nadie. Este italiano de 33 años decidió dar el gran paso en San Mamés, durante el partido del pasado domingo contra el Sporting. El primer «sí quiero» en la 'Catedral' tras una petición con tantos testigos.
Hace tiempo que la pasión por el equipo rojiblanco traspasa las fronteras de Euskadi. En el pueblo italiano de Osio Sotto, cerca de Bérgamo, en la región de Lombardía, el equipo estrella no es el Milan sino el Athletic de Bilbao. Allí se creó hace 12 años la peña 'Leones Italianos', unos 'tifosi' muy vascos. Alberto Pagno descubrió al conjunto de Bielsa a los 18 años, al leer un artículo de un periódico deportivo italiano en el que se hablaba de un equipo único en el mundo, con una filosofía muy singular. Desde entonces, el club de la sede de Ibaigane se convirtió en un «sentimiento».
Por eso, qué mejor lugar para pedir la mano a su novia Valeria, de 31 años, que la 'Catedral'. Ella también adora el Athletic y fue secretaria de los 'Italiako Lehoiak' en 2009. «Una petición tradicional no es mi estilo, quería compartir ese momento en mi segunda casa y con la peña con la que comparto una hermandad muy profunda», explicó Pagno. Quizá fue la primera vez que este seguidor del Athletic no prestaba toda su atención al juego de los rojiblancos para no quitar ojo al reloj del campo.
Cuando el árbitro pitó el final de la primera parte y los jugadores entraron en los vestuarios, llegó la hora de la verdad. En las gradas de Herri Norte, mientras los hinchas comían sus bocatas y pipas, Alberto y un compañero bajaron hasta la zona de la portería para desplegar la pancarta: «¿Vale vuoi sposarmi? ¡Vale, cásate conmigo!». Valeria, recuperada del primer sofocón por la sorpresita, aceptó.
«Ella no se lo esperaba, pero se puso muy contenta», cuenta el futuro marido. El estupor general de los 38.000 espectadores del estadio terminó con un fuerte aplauso para felicitar a la pareja. «Estamos todos invitados a la boda, ¿verdad?», le soltó un aficionado.
Todavía no tienen fecha para el enlace pero cuando regresen a San Mamés, algo que se producirá la próxima temporada, serán ya marido y mujer. «El Athletic es mucho más que un equipo. Es un sentimiento que une personas que creen aún en un fútbol con valores. El pueblo se ve en sus jugadores y los jugadores se sienten parte del pueblo», anota Pagna. El amor por los de Bielsa parece igual de fuerte o más que el que siente por su Valeria. «Representan un fútbol donde no sólo cuenta el dinero. Son aire puro para los que amamos este deporte», elogia el 'tifosi' del Athletic, que no se perderá la final de la Copa del Rey en Madrid.
Una pena que el resultado no acompañase la celebración de los 'Leones Italianos'. El gol del empate casi al final del partido ensombreció la fiesta, pero como buen hincha del Athletic, hay que estar siempre en las malas y en las buenas. Ya se lo recordará el cura cuando le case; aquello de... «en la salud y en la enfermedad».