Xabier Basañez Director General del BEC (Foto: P. Viñas)
¿Cómo definiría en una palabra el Athletic?
Lo haría en dos. País y afición.
¿Lo considera más que una religión?
Sí. Es lo que nos une a todos los vizcainos y una de las pocas cosas en la que siempre estamos de acuerdo.
¿Su primer recuerdo de niño sobre el Athletic?
Los cromos que teníamos en la escuela, hacíamos lo que fuera para tener a todos los jugadores del Athletic.
¿Quién le metió el gusanillo del fútbol en casa?
En el Athletic no hace falta que nadie te inculque el gusanillo, esta ahí. Naces y mueres con él.
¿Es de los que no perdona un bocadillo y una cerveza cuando ve un partido de fútbol?
Tomar una cerveza o un vino antes de entrar y el bocadillo del descanso son dos cosas sagradas.
¿Qué jugador rojiblanco es su preferido en toda la historia?
Iribar. Casualmente es el jugador al que menos he visto jugar, porque se retiró cuando yo era muy joven. Aun así, por todo lo que significa para el Athletic, me quedo con él.
¿Cambiaría un partido del Athletic por una buena cena o por una entrada para el cine?
No, pero tampoco son incompatibles.
¿Entendería que el Athletic fichara extranjeros?
Si se llegase a un acuerdo entre todos los socios habría que aceptarlo, pero en mi caso no lo entendería. Al final la identidad del Athletic consiste en jugar sin extranjeros.
¿Un pronóstico para la final?
Espero que ganemos 2-1 con goles de Williams y de Aduriz.
¿Le impone que la final ante el Barcelona sea en el Camp Nou?
Complica un poco más las cosas, pero vamos a ganar igual igual.
¿Qué sería capaz de hacer si el Athletic gana un título tres décadas después?
Lo celebraré por todo lo alto junto con un millón de vizcainos que estaremos al borde de la ría viendo la gabarra.