"David Alonso ha estado 25 años coleccionando insignias de peñas del Athletic acumulando más de 720. Ahora, con poco tiempo para dedicarle, ha decidido ponerlas a la venta"
martes, 13 de agosto de 2024
"Me gustaría que mi colección de pines acabase expuesta en el museo del Athletic"
Artículo publicado por Aitor García Morán en el diario Deia el 11/08/2024
El mundo del coleccionismo nunca deja de sorprender. Una práctica a día de hoy se ha convertido en un hábito muy habitual. David Alonso comenzó a coleccionar pines de peñas del Athletic “hace 25 años” acumulando más de 720 insignias de diferentes partes del mundo. El bilbaino recibe a DEIA en su hogar para recordar las diferentes experiencias y anécdotas que ha vivido a lo largo de estas dos décadas y media.
¿Cómo empezó la colección?
Empecé a competir y ahí es muy típico lo de cambiarse pines de las selecciones, en ese momento empecé a cambiar y me empezó a gustar. Un día estaba con mis aitas en Deusto tomando algo y entramos en el local de la peña de Peña Deusto. Ahí fue cuando me fijé en los pines. Para mí el Athletic ha sido mi pasión, soy socio desde el año 82 y, entonces, me compré el pin de la peña de Deusto, así fue como empezó esta fiebre. Luego te vas metiendo en el mundillo, ves que hay gente que colecciona y que hay mercadillos como el de la Plaza Nueva.
¿Sus padres hacían colecciones?
Me acuerdo que mi madre coleccionaba posavasos que era algo típico pero la verdad que siempre he sido un poco asquerosamente coleccionista. También tengo unas cuantas camisetas del Athletic, siempre me ha gustado guardar y coleccionar cosas.
Es una pasión que ha mantenido durante 20 años de un lado para otro.
Lo típico, igual te vas de vacaciones a Cádiz, oye, pues… ¿Dónde están las peñas de Cádiz? Y en una tarde en la que me he hartado de la playa me voy a buscar y la verdad que es una cosa muy bonita porque conocer mucho peñista y mucha gente muy aficionada al Athletic. Nosotros pensamos que aquí, somos súper del Athletic pero en cuanto sales fuera ves que la gente es tanto más que tú. Pero ellos no tienen San Mamés ni a los jugadores cerca a diferencia de aquí. Yo me acuerdo que iba de crío a que me firmasen los jugadores. Y claro, ellos no lo tienen por lo que ese sentimiento se multiplica.
¿Ha planificado sus vacaciones en base a la búsqueda de pines?
A tanto no he llegado. Cuando voy a un sitio que me gusta digo… Pues aquí tengo esto, esto y esto. Igual me he movido 50 kilómetros y 70 para conseguir uno pero luego es el gusanillo de ir, de encontrarlo, de tomarte una cerveza ahí con la gente. Cuando compartes esa afición por el Athletic…
¿Cómo logró localizar las peñas?
Entré a mirar listados del Athletic, les pedí un registro y algunas me pillaban cerca así que decía que si un día iba a tomar algo por ahí pues me acercaba al bar. Eso fue lo que me hizo engancharme.
¿Cuál ha sido el pin más difícil de conseguir?
Pues no me acuerdo de la ciudad, creo que eran leones italianos. Estuve recorriendo toda la ciudad en unas vacaciones para poder conseguirlo y al final, preguntando en los bares, me pasaron el teléfono del chico que lo llevaba. Fue una odisea pero guardo un recuerdo bonito.
La fiebre de los pines ha llegado a más de 720.
Yo pensaba que estaba enfermo, pero he conocido gente que entraba en su casa y tenía pines, banderas, camisetas... Es que no había un lugar de la casa en el que no hubiera algo del Athletic.
Y ahora la pone a la venta. ¿Por qué?
El motivo es que no tengo mucho tiempo para dedicarle. Ahora ya no es ir y comprar, porque vas a cualquier sitio en el que hay pines de peñas. Ahora se ha convertido en un negocio. Hay gente que saca pines que no existen para enriquecerse, entonces hay que hacer una labor de investigación. Y, bueno, también pienso que como todo en la vida son ciclos, he estado 25 años con esto y también pienso que la persona que la quiera, creo que le va a dar un buen uso.
¿Cómo ha calculado el precio? ¿Valor sentimental o precio de mercado?
Si pongo valor sentimental sería impagable. Al final, tienes que mirar cómo está el mercado ahora, por cada pin, y luego la pinera, que está hecha a medida. Para un particular es una cantidad elevada pero la verdad que mi ilusión sería el que el Athletic la adquiriera y la tuviera en el museo porque al final son pines reales que tienen su historia y su trabajo.
¿Cómo los ha cuidado?
Siempre les he pasado un poquito de agua muy suavecito con un paño húmedo para que no se vayan empolvando, pero, no le he puesto ningún tipo de producto. No me he fiado en el sentido de que cuando metes tema químico, hay algunos pines que tienen esas resinas que son antiguas y algún amigo me comentó que algunos quedaban bien, pero otros que se ennegrecían. Entonces, sería una pena que un pin de hace 18 años, por quererlo poner mejor los estropees.
¿Se ha interesado alguien?
Sí, me habrán escrito unas 50 personas, lo que pasa es que la mayoría quieren saber si los vendo sueltos. Lógicamente les he comentado que no porque, primero, sería un jaleo quedar con tanta gente y luego pienso que es una cosa que el que la quiera coja el pack completo y si no, me la quedo yo.
Al final, el coleccionismo le ha permitido ver el Athletic desde otro punto de vista.
Eso es, no es lo típico de ir a San Mamés sino que te metes en el universo Athletic vamos a decir. Ya no son solo los partidos, son personas que están en las peñas, que hacen sus comidas y sus cenas, gente que colecciona camisetas, balones... La verdad que creo que estamos un poco locos los athleticzales. Al final la pasión es tan grande que a cada uno le da por algún artículo del Athletic.